Santo Domingo. – Varios camiones, pertenecientes a la administración del vertedero Duquesa, ubicado en el municipio Santo Domingo Norte, fueron captados vertiendo lixiviados a una cañada que desemboca directamente en el río Isabela.
El acto ilegal que incrementa la contaminación de esta importante cuenca hidrográfica y pone en riesgo la salud de las comunidades aledañas.
El lixiviado es un líquido altamente contaminante generado por la descomposición de los desechos sólidos, que contiene metales pesados, compuestos químicos y microorganismos peligrosos.
Su descarga indiscriminada puede provocar la muerte de especies acuáticas, alterar ecosistemas y afectar la calidad del agua que abastece a numerosas familias de la zona.
Los residentes que viven en las inmediaciones denuncian que esta práctica no es un hecho aislado, sino recurrente, y que las autoridades responsables han mostrado escasa efectividad en su supervisión.
La administración y supervisión del vertedero recae en el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, en colaboración con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y otras agencias de cooperación.
Expertos señalan la necesidad de implementar sistemas de tratamiento de lixiviados, monitoreo constante y sanciones efectivas para prevenir que esta práctica continúe deteriorando el medio ambiente y la calidad de vida de las poblaciones cercanas.