Barcelona.- Un equipo de científicos encabezado por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB, España) identificó una nueva clase de péptidos antimicrobianos (AMP) en proteínas del cuerpo humano, una fuente de «antibióticos naturales» capaces de eliminar bacterias «multirresistentes» responsables de infecciones hospitalarias «graves».
Según explicó este miércoles la UAB en un comunicado, el hallazgo, que se publicó en la revista científica Molecular Systems Biology, podría abrir la puerta a tratamientos «más eficaces» frente a infecciones resistentes a los antibióticos convencionales.
El estudio se centró en analizar más de un centenar de «proteínas de unión a glicosaminoglicanos (HBP)», que normalmente «ayudan» en procesos como la coagulación de la sangre o la inflamación.
El investigador del Departamento de Bioquímica y de Biología Molecular de la UAB y coordinador del trabajo, Marc Torrent, explicó que la investigación se basa en una observación «curiosa»: «Ciertas proteínas de nuestro cuerpo que se unen a la heparina, una molécula que regula procesos como la coagulación y la inflamación, también pueden reconocer estructuras similares que se encuentran en la superficie de bacterias peligrosas».
A partir de esta idea, los investigadores identificaron y sintetizaron fragmentos de estas proteínas con «potencial antimicrobiano» y seleccionaron cinco péptidos que mostraron una actividad «potente» frente a bacterias gramnegativas responsables de infecciones «graves» en hospitales.
Uno de los péptidos, al que llaman ‘HBP-5’, resultó «especialmente» prometedor, ya que no solo elimina bacterias en el laboratorio de manera «eficaz» incluso en concentraciones muy bajas, sino que también actúa en un modelo de sepsis en ratones infectados, en el que el tratamiento ha logrado reducir la carga bacteriana en varios órganos de forma «significativa».
«Estos péptidos destacan por su potencia y especificidad, con una toxicidad muy baja en células humanas, lo que indica que podrían ser seguros como base para futuros tratamientos», detalló Torrent, que añadió que «se abre la puerta a una nueva familia de antibióticos derivados de proteínas propias del cuerpo, con la ventaja de que pueden actuar específicamente contra bacterias resistentes sin afectar a las células sanas».
Agencias