Colorado.- Anthony Edwards y Karl-Anthony Towns impulsaron el ataque de Minnesota por 106-80 a los Denver Nuggets el lunes por la noche, que dio a los Timberwolves una ventaja de 2-0 en las semifinales de la Conferencia Oeste sobre los actuales pero tambaleantes campeones de la NBA.
Towns y Edwards anotaron 27 puntos mientras los Wolves mejoraron a 6-0 en los playoffs y se dieron la oportunidad de cerrar a los furiosos Nuggets con victorias el viernes por la noche y el domingo en Minneapolis.
Los Wolves eran tan dominantes que hicieron que los Nuggets lanzaran ataques (Michael Malone) y objetos a la cancha (Jamal Murray).
Aaron Gordon lideró a Denver con 20 puntos, Nikola Jokic anotó 16 puntos y 16 rebotes, pero su tercer máximo anotador fue el suplente Justin Holliday con 13 puntos. Murray anotó 8 puntos con 3 de 18 tiros.
¿Herida de muerte para los Nuggets?
Los Wolves sorprendieron a los Nuggets con un golpe al cuerpo tras otro a pesar de que su pívot titular Rudy Gobert estaba de regreso en su casa en Minneapolis para asistir al nacimiento de su hijo el domingo. Pero no necesitaron la destreza de Gobert para bloquear tiros y proteger el aro esta noche para continuar su dominio sobre los Nuggets en el Ball Arena, donde Denver tenía marca de 36-8 antes de sus derrotas consecutivas ante Minnesota.
Kyle Andeson reemplazó a Gobert en la alineación titular y los Timberwolves acosaron a Jokic e interrumpieron la ofensiva de Denver de todos modos.
Durante un triunfo de 43-18 en la primera mitad por parte de los Timberwolves (Edwards estuvo en la banca durante gran parte del tiempo, nada menos) los Nuggets se frustraron tanto que Malone salió corriendo a la cancha y se enfrentó al oficial Marc Davis por un largo tiempo. Explotó durante un tiempo muerto y de alguna manera evitó una técnica.
Lo mismo hizo Murray después de que el base armador enfermo de Denver arrojara una bolsa térmica a la cancha en señal de frustración cuando Towns estaba a punto de anotar en una bandeja en el segundo cuarto.
No estaba claro si los árbitros se dieron cuenta de que fue Murray quien arrojó el objeto a la cancha y no un aficionado. Sin embargo, probablemente enfrentará un castigo de la liga.
Frustrado por sus lentos comienzos (los Nuggets han estado perdiendo por dos dígitos en seis de sus siete juegos de playoffs y por nueve en el otro), Malone desafió a su equipo a tener un buen comienzo por una vez.
"¿Qué estamos esperando?" suplicó después de la práctica del domingo.
Sólo Aaron Gordon hizo caso al llamado de su entrenador, anotando 13 puntos rápidos, incluido un triple que llevó a los Nuggets a 18-17 al final del primer cuarto.
Las cosas se desmoronaron para Denver después de eso porque Jokic fue el único otro titular que anotó para los Nuggets antes del segundo cuarto. Jokic anotó sólo ocho puntos al medio tiempo y Murray, todavía molesto por una distensión en la pantorrilla izquierda, anotó sólo dos puntos en la primera mitad para la peor actuación ofensiva del dúo en una mitad esta temporada.
Con una desventaja de 61-35 en el descanso, el déficit de 26 puntos de los Nuggets en el medio tiempo fue el mayor de Denver en un partido de playoffs en casa en la historia de la franquicia.
Los Wolves lideraban 82-60 después de tres cuartos y dominaron el resto del partido.
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