El PRM, diez años después.

Pues, diez años después, queda la sensación de que unos cuanto que no se mojaron los pies, llegaron cuando el barco atracaba en la orilla y han disfrutado con mejores privilegios las bondades de gobernar en un país de América Latina.

  • Francisco Paniagua
    Francisco Paniagua
  • jueves 20 febrero, 2025 - 1:01 PM
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Por: Francisco Paniagua

Cuando Hugo Tolentino Dipp propuso la creación de un nuevo partido para evitar el desgaste ante el inevitable secuestro de la vieja casa, planteaba consigo no solo un cambio de siglas sino también una renovación del fondo y las formas de lo que fue el PRD.

La urgentes elecciones del 2016 no nos permitieron sentar las bases de eso que todos queríamos pero que ningún Moisés  grabo en piedra, todo quedó en la memoria de cada militante.

La impronta de haber logrado un 35% del electorado en un debut sin recursos y hasta con poca fe, nos dejó en buena posición para lo  que seria un despegue sin retorno hacia del 2020.

A diez año de aquella travesía sin garantías alguien convenció a la cúpula del partido de que el PRM nación el ’20 y que lo logrado al inicio no tuvo méritos, sin embargo cabe preguntarse quién vendría al PRM si la actuación del ’16 hubiese sido pírrica?

La verdad es que sin esa presentación inicial el partido de gobierno no se hubiese convertido en el tan codiciado ascensor hacia el erario y la nómina pública.

Sociedad Civil, Aliados y Oportunistas.

Al convertirse en el único instrumento real de cambio, el PRM creció como la verdolaga, muchos visionarios llegaron temprano a construir el triunfo y la hoy cuestionada sociedad civil se monto en esa plataforma para generar su ascenso, pero también están los que esperaron hasta el ultimo momento para dar el salto, tanto que nunca se supo si llegaron al partido o al gobierno.

Pues, diez años después, queda la sensación de que unos cuanto que no se mojaron los pies, llegaron cuando el barco atracaba en la orilla y han disfrutado con mejores privilegios las bondades de gobernar en un país de América Latina.

Los sin perfiles.

En el PRM hay una clase fundadora que una vez llegado al gobierno fueron estigmatizados como los que no tienen el perfil para administrar la cosa pública, creando así un apartheid de los que fueron buenos para construir y los que son buenos para gobernar.

Lo que toca hacer.

todavía es temprano para que la clase dirigente evalúe el partido desde su génesis y se reencuentre con aquellos que iniciaron desde cero, porque a los partidos no le basta con ser grandes, también debe ser sanos.