Washington.- La candidata demócrata a la Casa Blanca, la vicepresidenta Kamala Harris, se desmarcó este miércoles de la polémica que desató el presidente estadounidense, Joe Biden, al llamar "basura" a los seguidores del candidato republicano, el expresidente Donald Trump, por el chiste racista sobre los puertorriqueños.
"Estoy totalmente en desacuerdo con cualquier crítica a las personas en función de a quién votan", expresó la vicepresidenta ante la prensa desde la base aérea de Andrews, a las afueras de la capital.
Se recuerda que, durante un mitin del candidato republicano Donald Trump en el Madison Square Garden de Nueva York (Estados Unidos) este domingo (27.10.2024), el comediante Tony Hinchcliffe, quien fue uno de los oradores que antecedieron el discurso del expresidente, dijo que "literalmente hay una isla flotante de basura en medio del océano en este momento, creo que se llama Puerto Rico”, comentario que ha causado indignación entre la comunidad latina.
Después de que estallara la polémica por sus dichos ante unos 20.000 simpatizantes, Hinchcliffe publicó un mensaje en la red X en el que dice que los puertorriqueños "no tienen sentido del humor" y que como es comediante se ríe de todo el mundo. Además, aseguró que le encanta la isla como destino de vacaciones y alegó que los demócratas sacaron de contexto sus palabras para hacerle pasar por "racista".
Previo a su comentario sobre Puerto Rico, el comediante lanzó una serie de chistes despectivos sobre el conflicto en Medio Oriente, y los votantes afroamericanos. Advirtió también que los latinos "disfrutan haciendo bebés”.
Malestar
Los líderes puertorriqueños de Nueva York lanzaron este lunes a su comunidad y a otros latinos del estado y de todo el país un mensaje contundente: "Salgan a votar" para derrotar en las urnas al candidato republicano Donald Trump tras el insulto a su país en un acto de campaña del exmandatario (2017-2021) en esta ciudad.
Los votos de los boricuas pueden ser determinantes en Pensilvania, Carolina o Florida.
Los puertorriqueños comenzaron ya desde el domingo a quejarse por las palabras del cómico Tony Hinchcliffe, que intervino ayer en el mitin multitudinario de Trump en Nueva York y que calificó a Puerto Rico de "una isla de basura flotante".
La reacción de los puertorriqueños a través del país no se hizo esperar y en Nueva York, que recibió a la mayor emigración puertorriqueña en la década de 1950, y donde aún viven unos 675.000, la ira fue latente hoy durante una abarrotada conferencia de prensa en la icónica La marqueta, la tradicional plaza del mercado de El Barrio y lugar de encuentro de esta comunidad.
"No volverás a la Casa Blanca" dijo dirigiéndose a Trump la congresista Nydia Velázquez, quien al igual que otros líderes latinos que le acompañaron en la conferencia, en medio de banderas de la isla y gritos de ¡We fight back (Contraatacamos)! y "Viva Puerto Rico!". Todos coincidieron en que votar contra Trump es un asunto de "respeto y dignidad".
Velázquez dijo que el comediante, cuyo nombre no quiso pronunciar, "dice que le gusta Puerto Rico y yo digo ¡mierda!", dijo, y recordó que hay 325.000 veteranos de guerra puertorriqueños y que muchos otros han muerto en las guerras que ha librado EEUU., además de hacer aportes de muchas maneras a esta ciudad, tradicional hogar para esta comunidad.
"A mis hermanos boricuas: demuestren que se ponen las faldas y los pantalones en su sitio y salgan a votar como nunca antes lo han hecho. Este es un racista y tenemos que decirle a los racistas que en EEUU no hay lugar para ellos ni en Puerto Rico", afirmó en la conferencia donde estuvo acompañada por varios congresistas y otros políticos locales y estatales, liderados por el también congresista Adriano Espaillat.
Recordaron que hay puertorriqueños en cada uno de los siete estados bisagra y que en Pensilvania, que hasta el último momento se disputan Trump y la vicepresidenta y candidata demócrata Kamala Harris, hay medio millón. Destacaron además que mientras la campaña de Trump insultaba a los puertorriqueños, Harris presentaba su plataforma para ese país, en un acto en Pensilvania y también aludieron a la indiferencia de Trump hacia la isla tras la devastación causada por el huracán María.
Aunque la campaña de Trump se desligó del comentario de Hinchcliffe, los enardecidos puertorriqueños respondieron con un refrán: "Dime con quien andas y te diré quién eres".
Y aunque los puertorriqueños en la isla no votan, pidieron a los 3,2 millones de habitantes que llamen a sus familiares y amigos residentes en los demás estados de EE.UU para que voten en contra de Trump.
Por su parte el congresista Espaillat recordó que es costumbre de Trump hablar mal de los latinos "y por eso le vamos a negar el voto y lo vamos a derrotar el 5 de noviembre. Nos sentimos ofendidos", afirmó al pedir un "voto de castigo" contra el exmandatario.
EFE