Angely Moreno
Periodista
Durante casi 15 años, los venezolanos se han estado movilizando en contra de los gobiernos de Nicolás Maduro, que heredó el liderazgo del Partido Socialista Unido de Venezuela tras la muerte de Hugo Chávez.
Y digo que su clase política no merece a los ciudadanos que tienen, porque pese a que millones de venezolanos han peleado a sangre y sudor por desprenderse del socialismo de Maduro… la oposición venezolana no ha alcanzado la suficiente madurez para luchar en conjunto por levantar a su país y representar dignamente a los venezolanos que unidos en un solo grito se oponen al madurismo.
El pasado domingo vimos, como el sistema electoral al servicio del gobierno, proclamaba a Nicolás Maduro, luego de impedir con leyes y la fuerza pública, que unos 7,7 millones de venezolanos puedan ejercer su derecho al voto, desde los países donde se han refugiado.
Muchas personas creen que el fraude en las elecciones sucedió el pasado domingo, y están equivocados. El fraude empezó con la proclamación de La Ley Orgánica de Procesos Electorales en 2009, en el gobierno de Hugo Chávez.
Cuando a penas estaban saliendo los venezolanos de ese país se estableció que solo los que estaban legales y en condiciones permanentes en otro Estado Podían votar, impidiendo con esto que menos del 3% de los 8 millones de votantes puedan ejercer su derecho al voto.
Pero luego se solidificó con la instalación en el Consejo Nacional de elecciones con un representante del chavismo en el Consejo Nacional de Elecciones como Elvis Amoroso, al que se le zafó en el primer boletín que la victoria de Maduro había sido aplastante.
El gobierno de Maduro no solamente ha mutado con el Órgano electoral, sino también con la clase militar y los demás poderes del Estado, incluso en las dos ocasiones en 25 años, en las que la oposición ha sido mayoría en el parlamento.
Al parecer, la clase política venezolana aún no se ha enterado de que el fraude no fue en estas elecciones, sino en todo el sistema que se ha configurado durante 25 para mantener a Maduro en el poder.
Incluso, Las sanciones que ha realizado la OEA a Venezuela a lo largo de estos años solo han perjudicado al pueblo, fortaleciendo con ello al gobierno de Maduro:
Primero, porque se encarecen los productos, viene la crisis y los opositores huyen hacia otros países, de donde no pueden votar Consolidándose con esto el poder de Maduro que atento a planes sociales seduce a gran parte de la población que le continúa votando