Miguel Bolívar Núñez: ‘El cine dominicano necesita ser el espejo de nuestra identidad y un motor de cambio cultural"

La Ley de Cine de 2010, descrita como un pilar para el desarrollo de la industria cinematográfica local, fue otro tema central de la entrevista. Si bien Núñez reconoció sus aportes en términos de incentivos fiscales y creación de empleos, también destacó problemas en su implementación.

  • G. Cabral
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  • martes 03 diciembre, 2024 - 6:46 PM
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Miguel Bolívar Núñez hizo un llamado a revitalizar los circuitos universitarios, proponiendo la creación de salas de cine en los subcentros de la UASD y en comunidades rurales. @TOTO TVN24/GC

Vozz Media network.- El guionista, director y documentalista dominicano Miguel Bolívar Núñez Ovalle compartió su análisis sobre el estado actual, retos y perspectivas del cine nacional. Con una trayectoria que incluye más de una decena de documentales y cortometrajes de ficción, el también docente de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), abordó temas clave como la evolución histórica del cine dominicano, el impacto de la Ley de Cine y la necesidad de una educación cinematográfica más inclusiva.

Miguel Núñez con su voz pausada se fue deslizando por los temas del séptimo arte con un dominio hilarante a través de Vozz Matutina, transmitido de lunes a viernes a las 7:00 de la mañana por el Canal 85 de Vozz Media Network, en la plataforma de Claro TV, Wind TVO, Santiago TV; bajo la conducción del periodista Gregory Cabral, Katia Morales, Juan Miguel Núñez y Francisco Paniagua,

El cine como herramienta de identidad y cambio

Miguel Bolívar inició recordando los orígenes del cine dominicano, desde sus primeros pasos en el siglo XX hasta su instrumentalización durante la dictadura de Trujillo. Según el cineasta, el renacer del cine en las décadas de 1960 y 1970, con obras como La silla (1963), marcó un punto de inflexión al abordar temas sociales y políticos. Sin embargo, criticó la falta de representaciones más profundas de eventos históricos como la Independencia o la Revolución de Abril de 1965.

Necesitamos un cine que documente nuestra historia y proyecte nuestra identidad cultural al mundo”, enfatizó Núñez, añadiendo que esto debe ir de la mano con un interés gubernamental más sólido para financiar proyectos de este tipo.

Ley de Cine: Avances y áreas de mejora

La Ley de Cine de 2010, descrita como un pilar para el desarrollo de la industria cinematográfica local, fue otro tema central de la entrevista. Si bien Núñez reconoció sus aportes en términos de incentivos fiscales y creación de empleos, también destacó problemas en su implementación.

Criticó la entrega tardía de los fondos del Fondo Pro-Cine, lo que afecta directamente a los cineastas. Asimismo, cuestionó que los incentivos se canalicen a través de empresas privadas en lugar de ser administrados directamente por el Estado. Propuso un modelo más transparente que permita financiar películas con un enfoque cultural, educativo y turístico.

“Es importante que los fondos lleguen a quienes realmente promueven el cine como una herramienta de transformación cultural y económica”, subrayó.

Educación cinematográfica y circuitos culturales

El cineasta destacó la importancia de integrar el cine en la educación, tanto en las escuelas como en las universidades. Según Núñez, esta formación es clave para preparar a las próximas generaciones de cineastas y generar un público que valore el cine nacional.

Además, hizo un llamado a revitalizar los circuitos universitarios, proponiendo la creación de salas de cine en los subcentros de la UASD y en comunidades rurales. “El cine debe ser accesible para todos, no solo para quienes viven en las grandes ciudades como Santo Domingo o Santiago”, dijo.

Proyecciones internacionales y retos estructurales

En cuanto al impacto global del cine dominicano, Núñez destacó producciones recientes como Cocote y Caribbean Fantasy, que han obtenido reconocimiento internacional. Sin embargo, lamentó la falta de proyección local de estas obras y de plataformas más amplias para nuevos talentos emergentes.

Señaló que el cine dominicano debe adaptarse a la era digital, aprovechando plataformas como Netflix y HBO para llegar a audiencias globales, pero sin perder de vista la necesidad de fortalecer la infraestructura local.

Un llamado al cambio estructural

La entrevista concluyó con un llamado a la acción. Para Núñez, fortalecer la industria cinematográfica requiere:

  1. Ajustes a la Ley de Cine para garantizar una distribución más equitativa y transparente de los fondos.
  2. Fomentar la educación cinematográfica, integrando programas en los planes educativos nacionales.
  3. Inversión en infraestructura cultural, abriendo salas de cine en comunidades rurales y universidades.

“Tenemos una industria naciente con un gran potencial. Pero para que el cine dominicano se consolide como una fuerza cultural y económica, necesitamos un compromiso real del Estado y de la sociedad en su conjunto”, concluyó el cineasta.

Con una combinación de pasión, experiencia y propuestas concretas, Miguel Bolívar Núñez Ovalle reafirma su compromiso con el desarrollo del cine dominicano, no solo como un medio artístico, sino como una herramienta para preservar la historia, promover el turismo y construir una identidad nacional sólida.

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