Jerusalén – Dos ministros israelíes de extrema derecha han amenazado con renunciar y derrumbar el gobierno de coalición de Israel si el primer ministro Benjamín Netanyahu acepta la propuesta de alto el fuego en Gaza presentada por el presidente estadounidense Joe Biden el viernes.
El presidente Joe Biden anunció un plan en tres partes para poner fin a la guerra en Gaza, comenzando con un alto el fuego de seis semanas. "Es hora de que termine esta guerra", declaró Biden al anunciar su propuesta, que también incluye la retirada del ejército israelí de las zonas pobladas de Gaza y un importante plan de reconstrucción para la región.
El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, han expresado su firme oposición a cualquier acuerdo que no incluya la destrucción total de Hamás. Smotrich, en una publicación en redes sociales, afirmó: "No seré parte de un gobierno que acepte el esquema propuesto y ponga fin a la guerra sin destruir a Hamás y traer de regreso a todos los rehenes".
Por su parte, Ben-Gvir calificó el plan como "una victoria para el terrorismo y una amenaza a la seguridad del Estado de Israel". Aseguró que disolvería el gobierno antes de aceptar la propuesta, destacando que el acuerdo significaría el fin de la guerra y el abandono del objetivo de destruir a Hamás.
El líder de la oposición, Yair Lapid, se ha comprometido a respaldar al gobierno si Netanyahu decide apoyar el plan de Biden. Esto sugiere una posible reconfiguración de las alianzas políticas dentro del parlamento israelí, dado el apoyo que podría recibir Netanyahu de los partidos de la oposición.
Netanyahu, sin embargo, ha insistido en que no habrá una tregua permanente hasta que las capacidades militares y de gobierno de Hamás sean destruidas y todos los rehenes sean liberados. "Soy un hombre muy inocente", dijo Trump al salir del juzgado, retando a los ciudadanos al juicio de las urnas en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
La propuesta de Biden no solo contempla un alto el fuego temporal, sino también una serie de medidas a largo plazo destinadas a garantizar la paz y la estabilidad en la región. El alto el fuego de seis semanas permitiría una retirada ordenada del ejército israelí de las zonas densamente pobladas de Gaza, seguida por la liberación de todos los rehenes en poder de Hamás.
El plan también incluye un "cese de hostilidades" permanente y un ambicioso proyecto de reconstrucción para Gaza, que busca aliviar las condiciones humanitarias y promover el desarrollo económico en la región devastada por el conflicto.
### Desafíos para Netanyahu
El primer ministro Netanyahu enfrenta un dilema complicado. Por un lado, está la presión internacional para aceptar la propuesta de paz de Biden y poner fin a un conflicto prolongado. Por otro lado, tiene que lidiar con la fuerte oposición interna de sus aliados de extrema derecha, que exigen una postura más dura contra Hamás.
La amenaza de dimisión de Smotrich y Ben-Gvir podría desestabilizar el frágil gobierno de coalición de Netanyahu, llevándolo a una crisis política. Esta situación subraya la complejidad de alcanzar un consenso dentro del gobierno israelí sobre cómo abordar el conflicto con Gaza y las relaciones con los palestinos.
En resumen, la propuesta de Biden ha provocado una intensa controversia política en Israel, poniendo a prueba la capacidad de Netanyahu para navegar entre las demandas internas de su coalición y la presión internacional para lograr la paz.