Redacción.- Las vacaciones de una mujer en la Isla Providenciales de Turcas y Caicos terminaron en tragedia. Esto ocurrió tras un ataque de tiburón de casi dos metros mientras intentaba tomarse fotos con el enorme pez.
La policía local informó que fue notificada del ataque del animal. Este sucedió mientras la turista de 55 años nadaba en la playa alrededor de las 10:30 a.m. hora local del 7 de febrero.
La víctima, cuya identidad no ha sido revelada, fue «llevada a tierra» y trasladada al Centro Médico Cheshire Hall para recibir tratamiento, según las autoridades.
“Nuestros pensamientos y oraciones están con la familia y los amigos de la mujer herida”, escribió la policía en un comunicado. “Esta investigación sigue en curso”.
Información ofrecida por las autoridades
La Fuerza de Policía Real de las Islas Turcas y Caicos y el Departamento de Medio Ambiente y Recursos Costeros no respondieron de inmediato a la solicitud de comentarios de People el domingo 16 de febrero.
El Daily Telegraph, citando a la policía, informó que la mujer, de Canadá, solo se había adentrado «unos metros» en el agua en Thompson Cove Beach cuando fue atacada.
«Se ha determinado que el turista había intentado interactuar con el animal desde aguas poco profundas en un intento de tomar fotografías», dijeron las autoridades al medio.
El marido de la mujer corrió al agua después del ataque para intentar asustar al tiburón. Lo hizo antes de que pudiera causar más lesiones, dijo la policía a The Daily Telegraph.
Según la publicación, a la víctima le amputaron uno de los brazos por debajo de la muñeca. El otro le amputaron a la mitad del antebrazo.
Se desconoce la especie del tiburón involucrado en el ataque. Pero se estimó que «medía aproximadamente 6 pies de largo», dijo la policía a The Daily Telegraph.
Tras el incidente, la playa fue cerrada por el Departamento de Medio Ambiente y Recursos Costeros, parte del Gobierno de las Islas Turcas y Caicos.
En una publicación en las redes sociales realizada el día del incidente, la agencia escribió: «Se recomienda al público permanecer fuera del océano hasta que el DECR dé el visto bueno».
La playa permaneció cerrada al día siguiente, según otra publicación.
El 9 de febrero, el DECR informó que la playa había reabierto, pero recomendó a los bañistas que permanecieran cautelosos.
«El DECR da el visto bueno, pero quiere recordar al público que siempre debe tener cuidado al disfrutar de los entornos costeros y marinos», se lee en un gráfico publicado en las redes sociales.
El epígrafe de la publicación decía: «¡Cuídate en el agua! 🦈 Siempre presta atención a tu entorno, sigue las recomendaciones locales y respeta la vida marina. Nada en áreas designadas, evita las aguas turbias y nunca nades solo. ¡Disfrutemos del océano de manera responsable!».
Agencias