SANTO DOMINGO.- A raíz del comunicado publicado por el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), en el cual informa que las empresas de taxis por plataformas tecnológicas que operan en República Dominicana deberán prestar servicio a no menos de un kilómetro de distancia del área donde prestan servicio las compañías de taxis tradicionales.
Los conductores de las aplicaciones digitales como los son Uber, Indriver y Didi en el gran Santo Domingo solicitan la inmediata destitución del director del Intrant el licenciado Rafael Arias, por querer coartar a los usuarios de sus servicios para favorecer a los taxistas tradicionales sin importar el sacrificio que cada conductor debe hacer a diario para el sustento de su familia.
El vocero de la asociación de taxistas digitales Juan Martínez expresó que Rafael Arias no puede ser juez y parte en esta problemática, porque responde a los lineamientos del sindicalista y también senador Antonio Marte, además según informaciones suministradas el director del Intrant tiene acciones en la compañía de apolo taxi.
“Esa normativa de que los vehículos que prestan servicios de taxis por plataforma no pueden exceder los 15 años de fabricación y deben tener su pintura, frenos, neumáticos y juego de luces en buen estado, deben ser aplicadas a las rutas de concho y a las guaguas del transporte público que andan botando los pedazos en la vía pública” manifestó.
Argumentó que los taxistas de Uber ofrecen a sus clientes un servicio de calidad, con vehículos en buen estado, higienizados, con buen aire, tratando al usuario con respeto y que por eso respaldan su trabajo.
Los taxistas expresaron que Uber ha sido un aliciente, un soporte a la gigantesca tasa de desempleo que se vive en la República Dominicana, en la actualidad son aproximadamente 30,000 socios conductores de Uber, y al igual que los tradicionales pagan impuestos en cada neumático que compran, en el combustible que consumen a diario, que a través de ellos se benefician tiendas, supermercados, farmacias, los gomeros y los que trabajan de manera informal en las calles.